Manipulación
La manipulación que puede influir en la disposición de los factores alimentarios en las personas sobreviene desde los diversos medios de comunicación (como la prensa, revistas, TV...), que realizan la difusión de la delgadez como un modelo perfecto, ya que atrae a muchas personas de alguna manera y así, atrae beneficios para estos medi
os; el receptor de los mensajes es invadido y manipulado por los medios de comunicación hasta el punto de llegar a ser víctima de unas pocas personas como son los especialistas en marketing, diseñadores, empresarios del mundo de la dietética, modistos etcétera. Deciden cómo debe ser el cuerpo ideal ante todos. Existe una relación entre las imágenes de delgadez anormal que dominan los medios de comunicación y el aumento de las patologías vinculadas al ideal físico.
Esta difusión se debe a la exteriorización del ideal de perfección. Si un especialista en marketing, por ejemplo, busca algo que atraiga a las masas y decida que un cuerpo de una mujer delgado y esbelto es una buena opción, hará a través de todos los medios que la población quede más y más sujeta al ideal de la perfección, por lo que muchas personas con cierto sobrepeso o incluso un peso normal podrían entrar en una decepción con su cuerpo ya que se verían menos valiosas y lo menospreciarían al sentirse cada vez menos atractivas para los demás. Esto es algo que lleva sucediendo desde hace muchps años ya que influye mucho dentro del mercado y el funcionamiento de las empresas.
El ideal tradicional de belleza ha ido cambiando según los años aunque el más típico es el prototipo de delgadez, que se asemeja con la perfección y la belleza, sobretodo se usa en las mujeres. Se usa a los mujeres como medio de atracción física para muchos hombres, por poner un ejemplo más claro. Un ejemplo es la imagen que aparece aquí abajo que quiere decir "mírame a los ojos... he dicho a los ojos" sobre un anuncio de ropa interior femenina.
La manipulación se ejerce a través de la coacción publicitaria, el mercado del adelgazamiento, la difusión del cuerpo delgado de los modelos como estereotipo y la difusión de páginas pro-anorexia ("pro ana") a través de Internet.