Causas

Es común que el tratamiento con insulina traiga asociado aumentos de peso, lo cual en ocasiones puede generar insatisfacción de la percepción estética que la persona tiene de sí misma. Esto se agrava especialmente en casos de adolescentes con un mayor riesgo en mujeres de esta edad.

Estos cambios en ocasiones pueden comportar el riesgo de que sin consultar con su médico la adolescente empiece a reducir, o eliminar su tratamiento con insulina o que caiga en prácticas que comportan patrones de los trastornos alimenticios tales como la anorexia y la bulimia.

A causa de los riesgos que comportan este tipo de trastornos para el paciente, se hace necesaria la intervención de un profesional de la nutrición que marque unas pautas alimenticias saludables evitando riesgos como cambios en los niveles de glucosa, por causa de unos hábitos de alimentación poco eficaces.